Pérdida.

La mañana del lunes comenzó un poco pesado, comenzaban los exámenes finales y muy pocos alumnos estaban entusiasmados, para el resto era el fin del mundo.

-¿Fran pero no lograste ver que era la sombra?- preguntaba Naty nerviosa.

-No…no pude ver bien que era, pero fue horrible, estaba muy asustada- respondió calzándose los zapatos.

-Pudo haber sido peligroso Fran, no vuelvas…

-…Pero tenía que verlo…y eso no es todo…Filch y su gata casi me descubren- conto Francis mientras se terminaba de colocar la túnica y se tejía una clineja. Naty se asombro aun más.

-Te pudieron haber expulsado Fran, te imaginas…Filch no desaprovecha las oportunidades para querer ver a un alumno recibiendo castigos fuertes- gruño Naty al ponerse ella también la túnica y recogerse el cabello con un lazo a un lado.

-Pero no me descubrió…así que no te preocupes- dijo Francis en tono aliviador –Además después de tanto peligro pude ver a Terry, que es lo mejor de todo- dijo alegrándose y mostrando una enorme sonrisa.

-Aja, tienes que decirme que tal estuvo la cita- Naty había cambiado su rostro preocupado y serio a uno de cotilleo. Francis le conto todo, con lujos y detalles mientras llegaban hasta la sala para ver a Kadaj y la lista de los exámenes del día:

9:30am: Cuidado de Criaturas Mágicas – Slytherin
1:15pm: Adivinación – Ravenclaw
4:00pm: Herbología – Hufflepuff

-Son las tres primeras materias del día, genial, y el primer examen será con los Slytherin, como si no fuera peor- se quejaba Francis mientras tomaba nota del horario.

-Adivinación, no quiero ir a ese salón de nuevo, la última clase que tuvimos me puso los pelos de punta- revolvía Naty su mochila buscando una pluma para anotar también lo que decía el cartel de anuncios.

-Tranquila, en el examen dirá quien morirá hoy- dijo Kadaj sarcástico –Hasta ahora no ha pasado nada de lo que dijo la profesora, así que dudo que sean verdad sus predicciones- dijo despreocupado.

-¿Te recuerdo quien estaba nervioso la última clase?- interrogo Francis mientras Naty y ella empezaban a reír, Kadaj se sonrojo y se giro vista hacia el retrato para salir a desayunar. Francis no sabía si contarle en ese momento lo de la sombra que había visto, estaba dudosa aun, tal vez fue su imaginación, iba tan agitada y cansada, asustada de que la descubrieran que ya había empezado a imaginar cosas, y trataba de tranquilizarse pensando que la sombra era solo algo imaginario. Desayunaron y se pusieron en marcha hacia los terrenos de Hogwarts, para ir a su examen de Cuidado de Criaturas Mágicas, Hagrid los esperaba impacientes para comenzar, la última clase había sido asquerosa y un poco agitada, y el examen seria un tanto sorpresivo, más que eso, una pequeña misión para él, pero una enorme para los alumnos.

-Hola Hagrid que tal estas- saludo efusivamente Francis, Naty y Kadaj hicieron lo mismo.

-Hola mis pequeños, como están mis alumnos preferidos- respondió Hagrid con una enorme sonrisa que apenas se podía ver entre sus enmarañados bigotes.

-Muy bien Hagrid, ansiosos de empezar el examen- mintió Naty, la verdad no estaban tan ansiosos, temían que Hagrid les pusiera como examen criar un monstruo de 8 cabezas distintas y con cuerpo de dragón oriental, no se sabía con que criatura podría salir Hagrid que amenazaras sus vidas.

-Pronto lo hare, les aseguro que os gustara mucho- aplaudió levemente y se dirigió camino a su cabaña para buscar unos terrones de azúcar.

-¿Qué será lo que haremos hoy?- soltó Kadaj mirando el interior del claro y frondoso bosque. Francis y Naty se encogieron de hombros y se sentaron a esperar a los de Slytherin, estos no tardaron mucho en llegar.

-Bien, el examen consiste en buscar un místico e interesante animal, un Unicornio- dijo Hagrid comenzando su clase –Lo buscaremos, y una vez encontrado lo estudiaremos.

-¿Pero donde comenzaremos la búsqueda?- pregunto Duna -¡¡Me encantan los Unicornios!!

-Y a mi igual Duna- decía Francis acercándose a ella con una enorme sonrisa.

-En el bosque prohibido- contesto Hagrid riendo nuevamente de felicidad –Ahora nos dividiremos por parejas, mientras más separados estemos, más posibilidades hay de encontrarlo, ahora, señorita Dellas, ira con la señorita Anaya…

Duna y Lali se juntaron y seguida de ellas dos se pararon Marcus y Kadaj y más atrás se pusieron Naty y Rossie, fueron formando una columna y empezaron a entrar en el bosque, seguidos por Hagrid.


-Un unicornio…no son muy fáciles de encontrar…he leído sobre el tema- resonó la voz malhumorada de Francis, y caminando a zancadas afincando cada paso.

-Pero tenemos que encontrarlo, a como dé lugar…es un fastidio tener a un loco como profesor…mi padre se enterara de esto- dijo una voz fina y fría.

-No…le vuelvas…a decir…¡¡LOCO!!- grito Francis parándose en seco y mirando a Hermi.

-No me grites, y le diré loco las veces que quiera, esta misma tarde le enviare una lechuza a mi padre para que lo echen del colegio, no te imaginas lo satisfactorio que será- afirmó Hermi mirando a Francis con una sonrisa picara de medio lado y una ceja levantada.

-Hazlo, y veras que te arrepientes- reto Francis con sus ojos totalmente lila.

-No te temo Wood, ni a ninguno de tus raros amigos- borro su risa y mostro dureza en su cara.

-No me obligues, te lo estoy advirtiendo- desafío Francis, dando media vuelta para seguir su búsqueda con Hermi o sin ella.

-Veremos si no puedo- Hermi cruzo los brazos y comenzó a caminar chocando el hombro de Francis y adelantándose sin mirar atrás. Francis sentía el impulso de quererla enredar con las lianas de un sauce y dejarla ahí en el bosque, pero se contenía. Pasado ya una hora de búsqueda Francis estaba exhausta y molesta, para colmo tenía que compartir todo un buen rato con Hermi, ya estaba convencida de que en Slytherin van las personas más repugnantes del colegio, sus pies le dolían y en cada paso escuchaba el crujir de las hojas secas.

-¿Hasta cuándo seguiremos buscando?- dijo Hermi sentándose en una raíz levantada.

-No sé, creo que se supone que hay que conseguir un Unicornio, no crees- contesto Francis sarcástica.

-Ja, Ja, Ja- Hermi la miro con desprecio.

-Ya levántate, si sigues sentándote nos retrasaras mas- Francis comenzó a caminar mirando a Hermi con desdén.

-Vete ¡Tú! sola- y diciendo estas últimas palabras Hermi se alejo de Francis en dirección opuesta.

-Esta, está loca…bueno así será mejor la búsqueda…lejos de esa pava ponzoñosa- Francis cruzo los brazos viendo a Hermi desaparecer de vista, dio media vuelta y empezó a caminar. Ya estaba muy adentrada en el bosque, y había una leve brisa que daba escalofríos, Francis miraba a todos lados con los ojos bien abiertos tratando de encontrar a un Unicornio, pero no veía nada, quince minutos ya habían pasado cuando Francis se disponía a volver, giró para caminar en sentido hacia el castillo, pero escucho algo detrás de ella, Francis voltio para ver que era y vio que un arbusto se sacudía, paró en seco y metió la mano en el bolsillo de la túnica para estar alerta.

-¡¡Perses si eres tu sal de una vez!!- dijo con voz seria y frunciendo el entrecejo, pero no había rastros de Hermi. Camino lento para acercarse al arbusto, pero un grito la distrajo por completo, esta saco la varita de inmediato asustada y salió corriendo siguiendo el eco del grito que acababa de escuchar, corrió, salto y aparto ramas hasta llegar a donde estaba la persona que esperaba verla herida, muerta o en peligro, pero no vio más que a Hermi con las manos en la boca.

-¿Estás loca?, me pegaste un susto- dijo Francis alarmada con el entrecejo fruncido y agitada de tanto correr. Hermi no mostro reacción alguna, estaba petrificada –¡¡Di algo!!- Francis la sacudió hasta que esta reacciono.

-¡¡SUELTAME!!- se aparto Hermi alejando a Francis –Me ensucias el uniforme- dijo Hermi mirándola con odio.

-A mi no me empujas y mucho menos…-

-… ¿Qué ha pasado?- la voz ronca de Hagrid sonaba nervioso y asustado -¿Están heridas? –dijo examinando a Francis y luego a Hermi, esta se aparto de Hagrid de la misma forma que había hecho con Francis. Detrás de Hagrid llegaron Marcus, Kadaj, Naty, Lali, Duna y el resto de la clase –Ohh, veo que han encontrado a 3 potrillos de Unicornios- se alegro Hagrid mientras iba por ellos. Eran tres unicornios dorados en lugar de uno, 50 puntos para Gryffindor y para Slytherin.

-¡¡NO!!...el unicornio lo encontré ¡¡YO!! Sola- se apresuro a decir Hermi –Francis me abandono en el bosque y me perdí, caminando buscando regresar los encontré.

-¡¡MENTIRA!!- grito Francis parándose junto a Hermi y mirándola fijo –Tú te quisiste venir sola, y no te perdiste MENTIROSA.

-Ya…ya- interrumpió Hagrid –No importa quien los ha encontrado, lo importante es que los consiguieron- dijo Hagrid acercando a los asustados potrillos.

-Usted no sirve para ser profesor, le diré a mi padre ahora mismo lo que hizo- Hermi se enfado y se alejo del grupo.

-No le hagas caso Hagrid, es una malcriada y mentirosa- calmo Francis al ver que Hagrid se sonrojaba ante las palabras de Hermi –Ella encontró a los unicornios, pero es mentira que yo la abandone- dijo apenada Francis.

-Bien- soltó Hagrid en voz baja y continuó con el resto de la clase –Estos son crías, y son más fáciles de ver, como ven son dorados.

- Cuando tienen dos años de edad se vuelven de color plateado, y a los cuatro les sale el cuer¬no- dijo Duna acariciando el cuello del potrillo.

-Muy bien señorita Dellas- dijo Hagrid contento dándole unos terrones de azúcar a los potrillos.

-Y a los siete se vuelven totalmente blancos, ya que alcanzan su adultez- también comento Crook.

-Confían mas en las chicas, porque se sienten seguros, los chicos no son de fiar- dijo Rossie con suficiencia.

-Bájale un poco ¿no?- siguió a decir Marcus mientras pasaba su brazo sobre el hombro de Francis que estaba distraída viendo algo mas allá de los arboles -¿Qué ves?- pregunto Marcus mirando en la misma dirección que tanto veía Francis.

-¿Eh?- vacilo totalmente distraída –Ehh…nada, no es nada.

-…Sí, sí, veo que han leído sobre los unicornios- Hagrid animaba su clase. Así continuaron, admirando y acariciando al unicornio, después de todo el examen no había estado tan difícil, y totalmente distinto a lo que imaginaban. Ya era hora de almorzar e ir a la torre de Adivinación, para su lúgubre examen, estaban tan exhaustos que arrastraban los pies como para nunca llegar al salón.

-Kadaj hay algo que tengo que contarte- comenzó a decir Francis mientras empezaban a subir por el tercer piso.

-Sí, dime, ¿pasa algo?- Kadaj la miro por un segundo esperando la respuesta de Francis.

-Sí, veras, anoche…

-Hola Francis- saludo Remus -¿Cómo estás?

-Muy bien Remus, ¿y tú?- saludo esta, viendo detrás de Remus para ver si estaba Terry con él.

-Igual… ¿hoy será el entrenamiento de cómo hacer un Patronus mensajero verdad?...

-…Si, será hoy, espero ver...

-… ¿A Terry? Jajaja si, el estará- se apresuro a decir Remus.

-Te iba a decir que esperaba verte ahí realizando el Patronus mensajero- dijo sonrojándose cuando Remus le nombro a Terry.

-Sí, estaré ahí, obvio, bueno, me tengo que ir, tengo examen de Runas Antiguas, saludos Naty, Kadaj- se despidió y siguió su camino en sentido contrario, lo vieron bajar unas escaleras hasta que desapareció de vista.

-Como te has puesto cuando te nombraron a Terry- Naty le daba con el codo a Kadaj para que viera la cara de Francis, este por un momento soltó una risa forzada y los tres siguieron su camino.

-¿Por qué te ríes?- dijo Francis con el entrecejo fruncido.

-Ahmm…por nada… ¿Qué querías decirme?- cambio rápidamente de tema evadiendo la mirada de Francis.

-Nada, olvídalo- espeto Francis acelerando su paso. Naty miro a Kadaj con el entrecejo fruncido y acelero el paso también, Kadaj se sonrojo y se metió las manos en los bolsillos. Subieron otros peldaños mas, ya les faltaba poco para llegar al aula de Adivinación cuando vieron que Josefina subía sola las escalinatas.

-¡Hola Jose!- saludo Francis cuando ya se había acercado lo suficiente.

-Hola Fran, ¿Qué hay?- Josefina estaba llena de pergaminos sumando que llevaba su libro de Disipar las Nieblas del Futuro Nº4 y el de Luis mas dos frascos de tinta.

-Hola Jose- saludaron Kadaj y Naty – ¿Necesitas ayuda con eso?- se apresuro a decir Kadaj.

-No, gracias Kadaj, muy amable…estoy bien- Josefina le sonrió y se sonrojo.

-¿Pero y Luis donde esta?- interrogo Francis.

-Dijo que lo esperara, fue a los lavabos pero no quería llegar tarde así que me adelante yo- respondió Josefina

-Bueno, tenemos que entrar a clases ya- comento Naty empujando a Kadaj y a Francis –Te vemos en el salón Jose.

-Ok- siguió caminando, con un poco de dificultad, y con problemas de visibilidad, no podía ver bien hacia donde se dirigía, hasta que…-¡¡Hay!!...qué rayos…- miro a su alrededor y todos los pergaminos cayeron regados por todas partes, los dos libros cayeron boca abajo abiertos y los frascos al caer se quebraron salpicando tinta por todos lados -¿Pero quién me ha tumbado?- miro bien hasta que se fijo en la armadura que estaba a un lado (nadie la había tumbado, se había tropezado), estaba tan distraída sobándose las rodillas que no vio que se estaban burlando de ella.

-Pego… ¿No segia mejog que tomagas la pata de la agmaduga y te la llevagas al salón?- dijo la voz sarcástica de Skarlet, las amigas de esta se rieron por el “Chiste”. Dramione estaba con ellas, pero no se reía.

-¡¡Cállate niña!!- dijo Josefina malhumorada mientras paraba de sobarse la pierna y se disponía a recoger los pergaminos.

-Limpia lo que ensuciaste, así le quitas el puesto a los asquegosos elfos- se burlaba aun mas Skarlet. Dramione se aparto de Skarlet para acercarse a Josefina – ¿Dgamione a dónde vas?- Dramione no respondió, siguió caminando hasta detenerse y agacharse a recoger los pergaminos. Josefina lo miraba pero este no hacia intentos de hacer lo mismo.

-Gracias- susurro Josefina, Dramione no respondió, camino hacia el salón sin mirar a ninguna parte, dejo a Skarlet y a sus amigas sin despedirse, y no le dirigía palabra alguna a Josefina. Entraron al salón y dejo los pergaminos y su frasco de tinta en el puesto de ella, luego camino a su asiento y saco su libro y otro frasco de tinta –Ehh…grac...

-…No hay de que- corto Dramione sin mirarla abrió su libro de Disipar las Nieblas del Futuro Nº4 y hundió la nariz en el.

-¿Pero que te paso Jose?- pregunto Menxu asombrada cuando se sentaba a un lado – ¿Cómo te has manchado toda la túnica de tinta?

-Me tropecé con una armadura cuando llegaba al salón, y los tinteros se quebraron y se rego toda la tinta- respondió sonrojada tratando de ocultar la túnica para que no se vieran las manchas.

-Bienvenidos mis queridos jovencitos…mis niños del alma- daba la bienvenida una tenue voz, ya muy familiar –Hoy, hay…que purificar la mente- decía mientras salía de un rincón y hacia florituras con las manos –Por cierto, 5 puntos menos para Ravenclaw- anuncio un tanto nerviosa, por su expresión se podría decir que esperaba una reacción violenta de parte de los alumnos de Ravenclaw.

-¿Pero por que cinco puntos menos profesora Trelawney?- pregunto Menxu frunciendo el ceño. En eso entro Luis, apresurado y pidiendo disculpas por el retraso, había llegado diez minutos tarde.

-¿Te costó encontrar el camino?- pregunto Dramione viéndolo con cara de pocos amigos.

-Eso no es tu problema- espeto Luis.

-Si es mi problema, nos han quitado cinco puntos por tu culpa- se levanto Dramione para estar a la altura de Luis.

-¿Y te morirás por cinco puntos?- pregunto molesto Luis.

-Si me muero por esos cinco puntos…que poco valoras tu casa- miro a Luis con desdén

-Esos cinco puntos los recuperas pronto, ya ves que tu todo lo consigues- Luis se había acercado a Dramione mirándolo fijo.

-Chicos ya ¡basta!- Josefina se levanto para separarlos. Toda la clase los veía, y la profesora tenía sus enormes ojos amplificados por los lentes como un balón, de Dramione a Luis y de Luis a Dramione.

-No te metas Josefina- gruño Dramione –De seguro te pondrás de su parte, como lo has hecho hasta ahora.

-No estoy de parte de ninguno, ya empiecen a madurar de una vez, parecen niños que pelean por un caramelo- dijo Josefina con voz aguda y temblorosa.

-Él es el que comienza ¡¡todo!!- Luis empezaba a alzar al tono de voz.

-¿YO?- se sorprendió Dramione –No tengo culpa de que me envidies.

-¿Eso es lo que piensas, que te envidio?- las últimas palabras las dijo formando comillas con la mano –Crees tener el mundo a tus pies, crees que puedes manipular a todos, caminas por los pasillos presumiendo tu tonta familia, eres pesado, y aunque nadie te lo dice, le caes mal a ¡¡todos!!- todas las palabras eran como dagas, Francis disfrutaba ver como Luis le decía puras verdades a Dramione.

-Eso solo lo sientes tu, porque quisieras ser como yo- Dramione cruzo los brazos y su mirada se había transformado en una de asco, veía a Luis como si este fuera un insecto.

-¡¡YA BASTA LES DIGO!!- grito Josefina, que parecía ser invisible.

-Cállalo a él…Josefina- dijo Luis frunciendo el ceño y mirando aun a Dramione.

-Claro, quieres que me calle, para no decir lo perdedor que eres, será por eso que Skarlet no quiso estar contigo y me prefirió a mi- Dramione dibujo una maliciosa risa de satisfacción.

-No peleen por esa ¡chica!, ella no vale los tres años de ¡amistad! que han tenido- exclamo furiosa Josefina.

-¡¡DEPULSO!!

Dramione cayó detrás de unas cuantas mesas que estaban al fondo acumuladas.

-¿¡¡Luis que has hecho!!?- decía Josefina nerviosa mirando el lugar a donde Dramione había caído, corrió hasta él para ver si estaba bien.

-Luis, tenias que controlarte- Francis se apresuro a él, al igual que Kadaj, Naty y Menxu se habían acercado. Pero Francis celebraba por dentro lo que había pasado.

-Apartaos…apartaos- apartaba apresurada la profesora Trelawney –Oh, mi pequeño estas bien- decía ayudando a Dramione a levantarse, Lali, Crook, y Josefina rodeaban a Dramione, este se levanto rojo de la rabia apuntando a Luis, este hacia lo mismo.

¡¡SECTUSEM…!!

-¡¡NO!!- grito Josefina bajando el brazo de Dramione –Te podrías ganar una expulsión…son amigos- Dramione se soltó, choco a Luis por el hombro y se dirigía hacia la puerta como un vendaval.

-¿Te dolió Dramione?- pregunto Francis de manera chocante.

-¡¡CALLATE MESTIZA TONTA!!- grito y salió perdiéndose de vista. Un momento de silencio invadió el salón, todos estaban confundidos, y algunos riendo. Fran se tensó por un momento y miró hacia la puerta por la que había salido Dramione sin expresión alguna en su rostro.

-Bueno… ¿Empezamos?- dijo la profesora distraída, como si no hubiera pasado nada, y con su aguda y tenue voz. Josefina rompió en llanto y salió del salón corriendo, Luis hizo el intento de agarrarla pero esta esquivó su mano.

-Déjala, luego hablas con ella- susurro Francis sobando la espalda de Luis consolándolo –No es tu…

-Déjalo Fran, gracias- Luis se sentó con los brazos cruzados y el ceño fruncido mirando fijo la bola de cristal (en realidad tenia la vista perdida). La clase continúo y el examen fue un tanto aburrido, los inciensos adormilaban a los chicos, y el remolino de la bola de cristal mareaba, Francis empezaba a sentir sueño…<>…Los parpados de Francis empezaban a pesarle, sentía que no podía más, ya lo que decía la profesora Trelawney no lo escuchaba, hasta que…


-¡¡NO POR FAVOR, NO!!- gritaba alguien, una voz femenina.

-¡¡No nos hagas daño!!- exclamaba una segunda voz, era la voz de un hombre muy familiar.

-¿Dónde está?...DIGANME DONDE ESTA!- una tercera voz sonaba vacía, sin sentimiento alguno, fría, y ronca, no parecía tener clemencia con las victimas que le rogaban que no les hiciera daño.

-No te lo podemos decir, NOOO- gritaba el hombre.

-NO LO VUELVO A REPETIR- con la varita levantada la apunto hacia el sujeto…Todo estaba blanco, un poco nublado, habían otras 5 personas más con él, sosteniendo a una mujer que se hallaba en una crisis de desesperación, al fondo se escuchaban unos gritos, posiblemente de personas excitadas corriendo de un lado a otro.

-¡¡NO TE PODEMOS DECIR DONDE ESTA!!- gritaba la mujer forcejeando para soltarse.

-Entonces…morirán, los pequeños…que leales quisieron ser, firmando con su maldita vida, la cercana muerte- dijo él con su voz fría y vacía con toda la serenidad del mundo.

-NO…A ELLOS NO LOS LASTIMES…MATANOS A NOSOTROS PERO A ELLOS NO…TE LO ROGAMOS- suplicaba desesperado el hombre.

-Descuida, no seas egoísta, hay para todos- se burlaba el de la fría voz. Francis veía todo tan claro, pero ella parecía estar invisible para ellos, trato de correr para ayudar a los moribundos, pero no se podía mover de su sitio, era desesperante, gritaba auxilio pero estaba muda, se ahogaba en las palabras, hasta que vio, como un rayo verde cubría toda la sala, esto la cegó por completo, buscaba con las manos algo que nunca iba a poder tocar, a lo lejos escuchaba que gritaban Marcus y luego gritaban repetidamente…Francis.


-Francis…Fran, despierta…te has dormido- la zarandeaba Naty –Fran, ¿Estás bien?

-Eh…- vacilo adormilada -¿Qué me paso?, ¿Dónde estoy?

-En clase de adivinaciones Fran, te quedaste dormida a medio examen- decía Naty mirándola con susto.

-¿Por qué me miras así?- Francis noto la mirada de Naty y luego vio a Kadaj que la miraba igual y con un deje de preocupación, se sintió empapada en sudor.

-Fran, ¿Qué te ha sucedido?- pregunto Kadaj.

-¿Por qué?- pregunto sin entender, luego vio a su alrededor y todos la veían estupefactos, algunos desde lejos pegados a la pared, la profesora la examinaba con la mirada- ¿Pero por qué me miran así?, no entiendo nada.

-Francis…estabas gritando…suplicabas, decías que no los mataran…preguntaste por Marcus para que te ayudara…lloraste- Naty se tapo la boca con las manos y se puso a llorar. Francis estaba confundida, no recordaba haber llamado a Marcus en ningún momento.

-Pero, ¿Qué soñaste?- pregunto Menxu

-Soñé…soñé que mataban a dos personas, y yo trataba de ayudarlos, pero no podía- contestaba Francis tratando de recordar el sueño –Era como si yo estaba allí, parada, siendo testigo de cómo asesinaban a…-Francis se detuvo, sus palabras se llenaron de vacío y empezaban a rodar lagrimas por sus mejillas.

-Mi pobre criatura…has tenido una visión, viviste esa visión…mi pequeña- la abrazo fuertemente la profesora Trelawney.

-No puede ser…no…¡¡NO, NO, NO!!- Francis rompió en llanto y todos la miraban aun aturdidos y confundidos, no sabían que era lo que pasaba. Francis se soltó de la profesora y se levanto de la mesa, sin querer la bola de cristal se cayó y rodaba acompañando sus pasos, corrió en busca de Marcus, desapareciendo de vista, Kadaj y Naty fueron a seguirla, Kadaj miro la bola al salir y vio una figura en ella al momento no la pudo distinguir, hasta que vio a un encapuchado de amarillos ojos y una sonrisa de satisfacción, no hizo caso y siguió a Naty.

-¿Pero que fue eso?- pregunto Crook asustado mirando a la profesora Trelawney.

-Han…apagado la vida, de Héctor y Lila Wood– dijo mirando la trampilla por donde acababa de salir Francis, Naty y Kadaj. Todos se asombraron y algunos quedaron petrificados al saber que Francis y Marcus acababan de quedar huérfanos.


Francis corrió a toda velocidad, de vez en cuando tropezaba a uno que otro alumno, estos la miraban con cara de pocos amigos, pero ella no prestaba atención, seguía corriendo por los pasillos, y bajaba a toda prisa de tres en tres los escalones, se hallaba perdida en sus pensamientos, llorando como si de eso dependiera su vida, llego al vestíbulo y ahí estaba, corrió otro poco más y se abalanzo sobre Marcus, este estaba tan aturdido y confundido, sabía lo que había pasado, porque sentía lo que Francis sentía, trataba de hacerse el fuerte para consolar a su hermana, aguantaba las ganas de llorar como un niño, pero no podía, no tenia lagrimas que derramar, pocos de los que pasaban a su alrededor los miraban con curiosidad, otros los señalaban mostrándole al compañero como lloraba Francis, eran tan ignorantes que no sabían que era lo que les pasaba a los Wood en ese momento. La profesora McGonagall se llevo a Francis y a Marcus a su despacho, Snape apareció después.

-Sentimos lo sucedido señorita Wood- decía la profesora Mc Gonagall consolándola. Snape solo miraba a Marcus, más no decía palabra alguna, estaba ahí por obligación, solo por que un alumno de su casa estaba pasando por gruesos aprietos –El profesor Dumbledore ya está al tanto, nos enteramos al recibir un vociferador del Hospital de San Mungo y otro del Ministerio de Investigación Mágica, Dumbledore está en camino, Investigaran quienes asesinaron a tus padres…presiento que cosas terribles se avecinan.

-Fue él…Dark…

-No nombres a ese asqueroso ser- resonó la profesora –Si lo hizo él, pronto lo sabrán, el Ministerio de Investigación Mágica nunca se ha equivocado en lo que respecta asesinatos…y en San Mungo, que poca seguridad hay…

Francis no escuchaba palabra alguna, miraba el suelo totalmente distraída, recordaba como los había visto la ultima vez, en coma, y en la visión ya estaban bien, pensó en que si podía haberlos ayudado, en el verano estarían como toda una familia, pero ya sería imposible, DarkSoul, había robado toda su futura felicidad.

-En media hora será su examen de Herbología, le diré a la profesora Pomona Sprout que te de permiso de faltar- decía la profesora Mc Gonagall buscando en su escritorio pergamino y pluma.

-Debería asistir a su examen, a pesar de lo sucedido, no creo que faltar a un examen reviva a…sus padres- dijo Snape con su fría voz, miraba a Francis por encima del hombro, Marcus vio a Snape con el ceño fruncido, y Francis lo vio con odio.

-Pero que dice profesor Snape, que no se da cuenta de lo que esta dicien…

-No se preocupe profesora, puedo asistir a mi clase, no tengo inconvenientes, además tengo examen- se apresuro a decir Francis mientras se secaba las lagrimas

-¿Pero cómo puede ir a un examen en ese estado?- interrogo la profesora anonadada.

-Podre, puedo con esto- dijo levantándose y tomando la mano de Marcus – ¿Nos podemos retirar?

-S…si, desde luego señorita Wood- dijo aun confundida la profesora. Marcus y Francis abandonaron el despacho seguidos de Snape que desapareció con un frufrú al cruzar por un pasillo cercano, Francis y Marcus se fueron a los terrenos del castillo, y vieron a Josefina, que seguía llorando después de tanto rato, Josefina se extraño de ver a Francis llorando y se acerco a verla.

-Fran, ¿Que tienes?- pregunto secándose una lagrima. Francis no respondía, seguía llorando abrazada a Marcus, este miro a Josefina tratando de explicarle lo que había pasado pero Josefina no entendía aun, paso un rato y se acercaba ya la hora para ir al examen de Herbología, Francis se despidió de Marcus y de Josefina, luego se adelanto a los invernaderos. Josefina tenía que ir a Cuidado de Criaturas Mágicas, se atraso un poco por que había olvidado su mochila, se volvió para irlo a buscar y camino de nuevo directo al bosque, caminando sumida en sus propios pensamientos no se dio cuenta de que la estaban siguiendo, miro para ver quien la seguía cuando reacciono, pero no vio a nadie, extrañada siguió caminando pero escucho el crujir de una rama.

-Luis, si eres tú para tratar de reponer el error, te aseguro que no estoy aun de humor- se giro molesta y parándose en seco, pero no hubo respuesta alguna -¿Dramione?- aun sin responder. Siguió caminando y el ruido lo escucho de nuevo mucho más cerca –¡¡Ya basta!! Quien quiera que sea- ya estaba poniéndose nerviosa, miro entre los árboles para ver quién era el gracioso o graciosa que quería molestarla, hasta que al dar media vuelta vio unos enormes colmillos y unos ojos amarillos, un grito salió de la boca de Josefina, un grito aterrador, un grito que paraba los pelos de punta, las aves que estaban cerca salían volando, un grito de desesperación, al ver semejante monstruosidad, prendió a correr desesperada y de vez en cuando miraba hacia atrás para ver si la seguía, y en efecto, el mostro volaba detrás de ella, le parecía gracioso perseguirla -Déjame…aléjate de mí- corría y corría, dejo caer la mochila para ser más liviana y correr mas rápido, piso en falso una rama y cayo, giro unas tres veces sobre ella y al quedar vista al cielo, apareció aquel extraño ser, con su capa negra que hacia frufrú de una manera descarada mientras el viento jugaba con esa capa, miro a Josefina fijo y la rodeo con su túnica, Josefina no vio nada mas de ahí, todo estaba negro.
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-¿Has escuchado eso?-preguntó Meme.
-Escuchar qué?-preguntó a su vez Lunita.
-Sonó como un grito…Ven, vamos a averiguar.
-No crees que debamos llamar a un profesor?
Meme se detuvo, pensando por un momento.
-Creo que mejor no, si resulta ser una falsa alarma, podrían castigarnos, además no tenemos pruebas.
-Y si resulta ser una falsa alarma como tú dices?-preguntó Lunita, dudosa.
-Nada perdemos con averiguar, ven, vamos.
Dicho esto Meme la jaló del brazo y ambas empezaron a caminar a paso apresurado hacia el lugar donde Meme escuchó que provenía el grito, llegaron allí, pero no había ni un alma transitando por ese pasillo.
-Ves? Resultó ser una falsa alarma. Mejor apresurémonos, tenemos examen de Transformaciones y no quiero que McGonagall nos baje puntos por llegar tarde.-dijo Lunita mientras se volteaba.
-Espera, ves eso en el suelo?-dijo Meme, señalando un objeto.
-Parece una mochila…la pregunta es, de quien será?
Ambas se acercaron con precaución, evitando tomar la mochila.
-Yo he visto esa mochila…-dijo Meme, pensando.-Ya sé! Es la mochila de Josefina!
-Si, también se la he visto, pero donde está ella?-preguntó mirando a su alrededor a ver si aparecia. Pero la que aparecio fue Menxu, la cual se acercó y las saludó.
-Hola Meme, Lunita. Como estan?-preguntó sonriendo.
-Bien y tu?-respondió Lunita.
-Bien gracias. Oye que haces con la mochila de Josefina?-preguntó viendo a Meme y a la mochila que sostenía.
-La encontré hace un momento. Luego de haber escuchado un grito.
-Un grito?-dijo Menxu con un deje de nerviosismo.
-Si.
-Y solo encontraron la mochila, cierto?
-Si, cierto. Que pasa Menxu?
-Tenemos que hablar con McGonagall.-dijo seriamente.
-Como? De seguro dejó olvidada su mochila aqui.-dijo Lunita no muy convencida.
-No, Josefina no es asi.
-Y entonces?
-Ya les dije, hay que hablar con McGonagall. Josefina ha desaparecido.-dijo Menxu con voz temblorosa.
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-Fran, estás segura que estás bien?-preguntaba Kadaj sentado al lado de Fran en el invernadero número 3, donde se llevaría a cabo su examen.
-No Kadaj, no estoy bien-dijo, reprimiendo un sollozo-pero debo presentar este examen, debo ser fuerte.-esto último lo dijo más para si misma.
-Pero habla con la profesora Sprout, estoy seguro de que entenderá.-dijo tratando de convencerla.
-Presentaré mi examen, Kadaj.-dijo con convicción y secándose una lágrima que amenazaba con salir.
-Pero Fran…-dijo Kadaj, mirándola.
Ella esbozó una pequeña sonrisa tranquilizadora y le susurró un “No te preocupes, estaré bien” mientras la profesora Sprout entraba al invernadero.
-Buenos Días, alumnos.
-Buenos Días, Profesora.
La Profesora se acercó a la mesa donde se sentaban Naty, Fran y Kadaj y le dijo a Fran.
-Fui notificada de lo ocurrido, Señorita Wood. Lamento su pérdida.
-Gracias Profesora.-dijo Fran en un murmullo.
-Si no se encuentra en capacidad de realizar el examen hoy, puede…
-No profesora-dijo Fran rápidamente-puedo presentar mi examen.
-Está segura?
-Si.
-Muy bien-caminó hacia su escritorio y empezó a hablar:
-Muy bien alumnos, hoy tendremos un pequeño cambio, antes de hacer el examen práctico me gustaría colocarles un pequeño test teórico sobre lo aprendido en este curso, no será muy difícil, consiste en…
El cerebro de Fran se desconectó, se llevó los dedos a las sienes, masajeándolas con la esperanza de calmar el incipiente dolor de cabeza que se avecinaba. Sus ojos se cerraron con pesadez, se sentía muy cansada, bajó sus manos al escritorio que hicieron algo de ruido, Kadaj la miró interrogante pero ella solo movió la cabeza de un lado a otro y Kadaj volvió su atención a la profesora, abrió los ojos y los volvió a cerrar, escuchaba a la Profesora, pero no entendía ni una palabra de lo que decía, hasta que una imagen parpadeó ante sus ojos…

-Crucio!-dijo una voz fría apuntando a un hombre en el suelo, este se retorcía y gritaba del dolor producido por la maldición imperdonable, unos gritos de mujer se escuchaban.
-DÉJALO!
-Es tu turno, sangre sucia…CRUCIO!-dijo apuntando a la mujer, ella se dejó caer al suelo y gritó de dolor.
-NOOOOOOOOOO!
Lo último que sintió Fran fue un agudo golpe en la cabeza y una voz que la llamaba desesperadamente antes de que fuera envuelta por la oscuridad....

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N/A: Hola otra vez amores míos! Sé que me tardé un mundo actualizando, pero es que uff! luego de que Dra me pasara la primera parte del cap, intenté varias veces escribir pero no me salían las palabras T.T, además de que estaba un pokitín atareada con la Uni.. así que hasta ahora es que pude actualizar, sorry. No creo que me tarde para el próximo, ya pronto saldré de vacaciones.. Viva Diciembre!! wiiii xD!
Espero hayan disfrutado el cap.
Un Beso.
Moon.